Boris Van Riel, Editor Empresa Periodística Somos Industrias
Me atrevería a decir que las empresas están pasando por procesos de tensión desde octubre con el comienzo de las manifestaciones producto del descontento social hacia la clase política, sumando a esto el peligroso avance del COVID-19. Se respiran aires de preocupación, de incertidumbre, de desacierto y es aquí donde nace en los colaboradores una necesidad en la figura de un líder, que los congregue, los aúna y, por qué no decirlo, los contenga. Hablo de la figura de un “Líder”.
Desde hace un tiempo, la nueva tendencia en hacer empresa reconoce diferencias sustanciales entre un “líder” y un “jefe” dentro de la empresa; exponiendo las características de ambos en un sin fín de charlas, conferencias, clases magistrales y una serie de otras instancias académicas que valoran la importancia de una persona que sea capaz de empatizar con los trabajadores, que los empape del espíritu de la empresa y que los reúna en una tarea común de éxito.
Es ningún caso digo que el jefe sea una figura negativa dentro de la empresa, pero si esta misma persona se transforma en un líder es innumerable la cantidad de beneficios que esto puede traer al negocio, porque afecta positivamente en factores tan importantes como la productividad, la identidad corporativa, el trabajo en equipo, etcétera.
Se preguntará por qué oriento la editorial a este tema, primero porque es un tema que me apasiona profesionalmente y segundo, porque si hay algún “jefe” leyendo esto podría tomar la iniciativa de convertirse en “líder” y aprovechar esta crisis positivamente dentro de su empresa para formar equipo.
Hoy, cuando el futuro económico del país y el mundo es incierto, como empresarios, debemos echar mano a todo lo necesario para disminuir los efectos negativos que puedan causar descontento entre los colaboradores, esto por factores tan importantes como la productividad, la seguridad laboral, etcétera.
La invitación es a abrir los ojos a las nuevas y mejores maneras de hacer empresa, horizontalizar la empresa como un gesto humano de producir en un clima lo mas amable posible entre tanta preocupación.
Boris Van Riel
Editor
